¡Qué asco! La historia de "El Horror de Amityville" no es más que un espectáculo sensacionalista que se alimenta de la ignorancia de las masas. ¿De verdad creemos que una casa en un tranquilo pueblo de Long Island puede ser el epicentro de fenómenos paranormales? Es una burla a la inteligencia de todos. Esta narrativa ha sido explotada hasta el cansancio, dejando de lado la realidad de las familias que habitan esa zona. En lugar de buscar respuestas reales, preferimos quedarnos atrapados en cuentos de terror absurdos. ¡Basta de alimentar mitos y leyendas que solo buscan crear pánico y distracción! Amityville merece más que ser un simple atractivo turístico para